La Facultad de Educación de la Universidad Autónoma de Chile, sede Talca, llevó a cabo una “Jornada de articulación y fortalecimiento de la formación práctica y de profesores”, con el objetivo de robustecer la formación práctica y el desarrollo profesional de los futuros docentes.

La actividad reunió a actores clave del ecosistema educativo regional, incluyendo profesores guías, representantes de establecimientos escolares y académicos de la universidad.

El decano de la Facultad de Educación, Rodrigo Fuentealba, destacó la importancia de establecer vínculos estrechos con el medio externo para potenciar la formación docente. «Cuando uno piensa en la formación de un profesor o una profesora, necesariamente tiene que hacer referencia a los espacios de intervención y de práctica. Nuestra Facultad ha optado por un modelo formativo que implica una relación muy cercana con los establecimientos educacionales y los profesores que allí se desempeñan», afirmó.

Fuentealba enfatizó que el desarrollo docente no solo requiere oportunidades de práctica, sino también instancias de modelamiento, discusión y proyección pedagógica. «Para que esto sea posible, es necesario generar un lenguaje común y compartido dentro de nuestra comunidad académica. Estas jornadas nos permiten detenernos, analizar nuestras acciones, ponerles nombre, compartir experiencias y establecer un marco de acuerdo y acción conjunta», agregó.

Por su parte, el vicedecano de la Facultad de Educación, Francisco Gallegos, explicó que la jornada tuvo como objetivo central que los profesores guías de los establecimientos escolares conocieran a fondo el modelo de práctica de la Universidad Autónoma de Chile. «Buscamos que comprendan la importancia de su apoyo en la formación de nuestros estudiantes, que identifiquen las labores en las que se desempeñarán y que puedan contribuir a la mejora continua del proceso de enseñanza-aprendizaje», sostuvo.

Gallegos subrayó que la gestión de la práctica dentro de la Facultad de Educación está orientada a garantizar que los futuros docentes desarrollen las competencias necesarias para enfrentar los desafíos del aula. «Nuestros estudiantes pueden lograr ser mejores profesores a partir de la calidad de la orientación y acompañamiento que reciben en sus prácticas. Esta articulación con los establecimientos educativos es clave para su formación», concluyó.

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