Con una jornada cargada de alegría, juegos y espacios de encuentro, la Universidad Autónoma de Chile, sede Talca, celebró una nueva versión del Día de la Familia, una actividad que ya se ha convertido en una tradición dentro de la comunidad universitaria y que busca fortalecer los lazos entre los colaboradores y sus seres queridos.

La encargada de Desarrollo de Personas, Raquel González, destacó el valor que esta celebración tiene para la institución, “el Día de la Familia es una actividad que venimos realizando desde hace tres años y que tiene un gran significado para nuestra comunidad, ya que pasamos gran parte del día en el trabajo, contar con un espacio para compartir con nuestros seres queridos en nuestro entorno laboral genera bienestar, alegría y un sentido de pertenencia”.

La actividad, transformó los espacios de trabajo en un ambiente distendido, lleno de risas, dinámicas lúdicas y zonas interactivas para niños y niñas. “Muchos colaboradores extendieron la invitación más allá de sus hijos, integrando a sobrinos y niños del corazón, reflejando la diversidad de vínculos familiares presentes en la comunidad universitaria”, señaló Raquel González.

“Nos preocupamos por brindar un espacio inclusivo, considerando las necesidades especiales de algunos niños. Sus familias nos entregaron indicaciones que permitieron adaptar las actividades y asegurar una experiencia positiva para todos”, agregó González, subrayando el compromiso institucional con la inclusión y el bienestar.

Los monitores encargados de guiar las actividades fueron estudiantes de la propia Universidad, previamente capacitados por el Prevencionista de Riesgos, Jorge Gallardo y la misma encargada de Desarrollo de Personas, con el fin de brindar un acompañamiento seguro y personalizado a cada participante.

Uno de los participantes junto a su hijo, el profesor de Ingeniería Civil Industrial, Cristian Sáez, expresó que “la Universidad nos ofrece una bonita oportunidad para compartir con la familia, para que los niños puedan ver el ambiente en el cual trabajamos. Es una experiencia distinta, y quizás también proyectamos en ellos un posible futuro en estos mismos espacios”.

Por su parte, la docente de la carrera de Enfermería, Judith Moris, subrayó el valor emocional de la actividad, “pasamos muchas horas en el trabajo, y qué rico poder traer a mi hijo para que vea dónde trabaja su mamá. Eso hace que todo se vuelva más amigable y familiar”.

Esta celebración reafirma el compromiso de la Universidad Autónoma de Chile con el desarrollo integral de su comunidad, promoviendo valores como la cercanía, el respeto y el sentido de pertenencia, fundamentales para una cultura organizacional sólida y humana.

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