Desde que comenzó la pandemia del Covid-19, la salud a nivel mundial ha cobrado una importancia mucho mayor en todas sus áreas. Y, en ese sentido, la nutrición no ha estado ajena a las necesidades de las personas.
Actualmente, el rol del nutricionista adquiere una relevancia mayor, pensando que una alimentación saludable y adecuada es trascendental para el correcto funcionamiento del sistema inmunitario, según la propia Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, es clave para prevenir otras enfermedades como afecciones cardíacas, diabetes, algunos tipos de cáncer y obesidad, que han demostrado ser un factor de riesgo en pacientes contagiados con el virus SARS-COV-2.
Desde la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Autónoma de Chile en Santiago, plantean la idea de “resiliencia nutricional en tiempos de pandemia”, que según el movimiento Scaling Up Nutrition, que inició formalmente en 2011 para combatir los efectos de la desnutrición en el mundo, tiene que ver con “la capacidad de mantener un estado nutricional adecuado ante una situación de crisis”.
Frente a ello, desde esta casa de estudios se ha buscado aportar desde la disciplina, pero sin dejar de lado el aspecto social. Así, en 2020 surge el programa “Autónoma a tu servicio”.
Esta iniciativa, que responde al eje de Responsabilidad Social Universitaria, ofrece asesorías en línea y gratuitas a toda la comunidad universitaria, entregando una orientación alimentaria nutricional a quien lo requiera.
A la fecha ya suma 77 consultas nutricionales a cargo de 27 estudiantes voluntarios, permitiéndoles poner en práctica los conocimientos adquiridos en la Universidad Autónoma, con un alto grado de responsabilidad social.
Teniendo en cuenta el escenario actual al que se enfrentan tanto los nutricionistas y alumnos, desde la carrera hacen un llamado a la reflexión. “Si cada uno de ustedes a futuro, trabaja con la convicción de que nuestras acciones generarán un cambio e impacto positivo en las personas, podremos ampliar el campo de acción de nuestra labor, el cual no sólo se circunscribirá exclusivamente a un ámbito asistencial, si no que además tendremos la oportunidad de generar las instancias para ejercer nuestro rol en todos los espacios en donde la nutrición, se conciba como eje esencial para el desarrollo de las comunidades”.