Erradicar la violencia contra las mujeres y niñas: Un compromiso impostergable
El 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, es un recordatorio de la tarea pendiente en materia de derechos humanos. A pesar de los avances logrados en las últimas décadas, la violencia de género sigue siendo una realidad que afecta a millones de mujeres y niñas en todo el mundo, sin importar su clase social, raza o edad. Según cifras de Naciones Unidas, casi una de cada tres mujeres ha sido víctima de violencia física o sexual en algún momento de su vida.
Este problema no solo persiste, sino que se diversifica. En la era digital, la violencia de género ha encontrado nuevas formas de manifestarse. El ciberacoso, la difamación, la suplantación de identidad, el astroturfing (estrategia para compartir contenidos perjudiciales en las plataformas), las amenazas violentas y la difusión de imágenes íntimas sin consentimiento son algunas de las agresiones más comunes que enfrentan las mujeres y niñas en línea.
El Institute of Development Studies estima que entre el 16 y 58% de las mujeres en el mundo sufren algún tipo de agresión digital, mientras que un informe de The Economist indica que el 38% de las mujeres han tenido experiencias personales de violencia en línea, y el 85% han sido testigos de ataques contra otras mujeres.
De acuerdo con Cyber Civil Rights Initiative, más del 90% de los casos de difusión de imágenes íntimas no consentidas afectan a mujeres, y un estudio de la Comisión de la Banda Ancha para el Desarrollo Sostenible de la ONU señala que el 73% de las mujeres han enfrentado alguna forma de violencia de género en línea, donde el 61% de los agresores son hombres.
La violencia tampoco se detiene en el ámbito digital. Según el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW), las mujeres y niñas enfrentan violencia de género en todos los espacios donde participan, desde el hogar hasta las redes sociales, pasando por la escuela, el trabajo, la política y el deporte. En contextos de guerra y crisis humanitarias, la situación es aún más grave, ya que se estima que el 70% de las mujeres que viven en estas condiciones extremas experimentan violencia de género.
Frente a esta realidad, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer debe ser un llamado a la acción para impulsar políticas públicas efectivas que prioricen la sensibilización, prevención y protección en todas las etapas de la vida.
En este sentido, la academia desempeña un papel fundamental en la formación de profesionales para abordar la violencia de género desde diversas disciplinas. Las universidades tienen la responsabilidad de incorporar en sus currículos enfoques que promuevan la igualdad de género y la prevención de la violencia para que así los espacios académicos se conviertan en entornos seguros. Al mismo tiempo, la colaboración entre las instituciones y la sociedad civil puede potenciar la generación de soluciones prácticas basadas en evidencia, desde herramientas tecnológicas para detectar el ciberacoso hasta programas educativos que derriben estereotipos de género.
Erradicar la violencia contra las mujeres y niñas deber ser un compromiso impostergable y un esfuerzo colectivo por parte de los gobiernos, las organizaciones y la ciudadanía. Cada 25 de noviembre es una oportunidad para construir un futuro más seguro para todas y todos.
Natalia Aguayo León
Coordinadora Unidad de Igualdad de Género VRID
Universidad Autónoma de Chile
